Llegué al Parque y lo primero que hice fue ver cuál era la formación titular para el partido y me empecé a entusiasmar.
Mejia, Mendez (1), Corujo (2), Carvalho, Viña (3), Garcia (4), Zunino, Carballo (5), Ocampo (6), Rodriguez (7) y Vecino (8), la Cantera Inagotable presente y vaya de qué forma.
Quizás no a todos les pasa, pero a mi en particular los jugadores surgidos en el Club son mi debilidad futbolística, debe ser por los años que vengo viéndolos jugar y esperar… y esperar para verlos en primera. Es cierto, no todos llegan o no todos tienen el nivel para jugar en el primer equipo de Nacional, pero lo que sí está asegurado es el sentido de pertenencia.
Son muchos años en el Club desde la sub 14 hasta llegar a primera, el camino es complicadísimo y solo algunos pueden llegar, pero esos algunos valen la pena el trabajo de todos los compañeros que lo ayudaron a formarse.
Para destacar “Santi” Rodríguez , Brian Ocampo y Thiago Vecino, fueron campeones de la Libertadores sub20 y hoy están compartiendo minutos en el primer equipo, mucho se habló de tener una base de esa generación, también están en el plantel y ya debutaron en primera Laborda y Emiliano Martínez.
Entrando un poco al partido que empezó con todo para el Bolso ya qué a los tres minutos pasó a ganar con un pase exquisito de Zunino para su tocayo Matías Viña que no desaprovecha y pone el 1 a 0. Confirmación del gran momento que atraviesa y ahora además le empezó a sumar goles.
Después del gol Nacional tuvo unos minutos de buen fútbol sobre todo cuando se juntaron Carballo, Santi y Ocampo, donde parecía que podía venir el segundo gol en cualquier momento.
A Racing le cayó como un balde de agua fría el gol y estuvo unos minutos sin poder reaccionar, pero de apoco se empezó a acomodar en la cancha y la figura de Arismendi empezó a crecer.
En el medio se dio una lucha titánica, García por un lado y Arismendi por el otro hacían de las suyas para ordenar y poner presencia, Carballo intentaba darle balance, adueñarse del medio campo y darle criterio al ataque tricolor, Zunino buscaba aparecer por los costados en ataque y ayudar en las coberturas, de a poco esa guerra estratégica empezó a ganar en protagonismo y el partido cayó en intensidad, eso llevó a que las ocasiones de gol escasearan.
Fueron pasando los minutos y todo seguía igual, alguna jugada de peligro para cada lado pero sin poder capitalizarlas.
Para el segundo tiempo la tónica empezó igual pero con la diferencia que Racing hizo el desgaste, trató de presionar más arriba pero sin mucho resultado.
Todo indicaba que el partido iba a terminar 1 a 0, los dos equipos carecían de profundidad, hasta que se dio el cambio que quebró el partido, el ingreso de Pablo García a falta de 15 minutos para el final, en una de las primeras pelota que toca hace una jugada soberbia con sombrerito incluido a un jugador de Racing y le pone una habilitación a Vecino que no perdona y pone el 2 a 0.
Casi de inmediato el propio Pablo García nuevamente habilita a Vecino que otra vez no perdona y saca un zapatazo al ángulo y pone el 3 a 0.
Racing nunca pudo recuperarse, primero porque no le quedaba tiempo y segundo por que no tenía las fuerzas necesarias.
En conclusión, Nacional ganó justamente un partido que lo controló en el mediocampo con un gran trabajo de Carballo, el ingreso de Pablo García y la efectividad de Viña y Vecino.
Goleador: Thiago Vecino que se reivindicó convirtiendo dos goles
La Figura: Matias Viña
El Acierto: De “Guti” con los cambios
Guillermo Canale
laabdon.com.uy